jueves, 13 de noviembre de 2014

Comunicado de BDP sobre el nombre del Microestadio

No es sólo el nombre

Se ha instalado desde hace unos días en las redes sociales y medios partidarios trascendidos relativos al nombre que portaría el Microestadio que se está montando en la Sede del club y que terminaron generando un comunicado oficial de la Comisión Directiva al respecto.
Observamos y compartimos que muchos socios e hinchas han manifestado sus preocupaciones y objeciones referidas a que la denominación en estudio no llevaría el nombre "Atlanta" tal cual se manifestó en la Asamblea que lo aprobó aquel 18 de diciembre de 2012 y según consta en el contrato de concesión entre el club y la empresa Lugones Center S.A. (Inciso D de la cláusula Segunda).
Si la comunidad bohemia interpreta como vejatorio este tema (que no es menor, a sabiendas de la representatividad y valor económico y social que adquieren en las estrategias de marketing modernas las cuestiones relacionadas con las marcas y denominaciones comerciales), mucho más preocupante es descubrir nuevamente la precariedad exasperante del contrato firmado.
Hacemos la pregunta clave: en caso que Lugones Center o la Sociedad Fideicomisaria inscripta para la explotación del ME no incluyeran el nombre "Atlanta", ¿qué sanción punitiva tiene prevista el contrato? La respuesta es fácil y previsible: NINGUNA. Solamente una segura judicialización del tema, de cuyo incierto resultado es inútil hablar por impredecible.
Si quienes se arrogan poseer el conocimiento y experiencia para administrar el club (contando la actual CD con cantidad suficiente de abogados en su conformación) han suscripto un contrato con tantas deficiencias formales y tan beneficioso para la concesionaria del ME, sólo nos queda pensar en la flagrante intencionalidad de favorecer al ingeniero Miguel Mancini -directivo de la empresa- y sus eventuales y desconocidos socios. En esto no pueden aducir desconocimiento ni impericia y arroja un pesado manto de sospecha sobre la actuación de esta Comisión Directiva y la anterior a la hora de defender los intereses del Club Atlético Atlanta, que con tanto ahínco vociferan.
Esta tendenciosa y excesiva bondad en el trato hacia los incumplimientos que viene desarrollando la dirigencia del club es más preocupante que el nombre mismo. Criticamos la deficiente redacción del contrato desde previo a su aprobación (http://www.bohemiosdeprimera.com.ar/2012/11/microestadio-mas-dudas-que-certezas.html) y su laxitud y fallas conceptuales.
Consecuentes en nuestro accionar, ya que nos mueve velar por los intereses del club en todos sus frentes, con fecha 23 de octubre de 2014 Bohemios de Primera presentó un pedido de informes en relación al Microestadio, cuya copia se publica y que como tantos otros antecedentes que se acumulan, no ha recibido respuesta de las autoridades.
Es tiempo de decir basta a las decisiones soberbias, inconsultas y oportunistas que terminan perjudicando al club y beneficiando el bolsillo de unos pocos.