La era Sialle arrancó con el pie derecho aún sin jugar bien. Se vio un equipo bastante duro luego de una pretemporada fuerte. El más encendido en los primeros 15 minutos fue Mancinelli, con muchas ganas pero sin poder profundizar cada avance.
Rápidamente y en la primer jugada de ataque que tuvo, la visita se encontró con la ventaja en el marcador tras un rebote largo que dio Barucco y la entrada de Pasquale, que sólo tuvo que empujarla para que todo el público Bohemio siga sin despertar de la pesadilla que vivió en el último semestre.
El ataque de Atlanta era tibio y predecible. Lo más claro estuvo en los pies de Martínez y Maraschi, ambos de rebote, que no pudieron conectar con claridad. Atlanta no manejaba bien la pelota en el mediocampo, Cortizo que no se sentía cómodo, Galeano que estuvo desaparecido y Serrano que daba mejor los pases difíciles y no tan bien los fáciles.
Sialle cambió rápidamente en el entretiempo; Pedrozo ingresó por Galeano, fue de punta sobre la derecha, mandó al Bicho a la izquierda y Quiroga se retrasó al mediocampo donde fue fundamental para estar mas cerca y potenciar a Benítez
La segunda parte Atlanta la afrontó de otra manera. Un equipo más adelantado y mas ambicioso. A los 5 minutos, Pedrozo fue golpeado dentro del área para que Mastrangelo, de flojo partido, cobrara penal. La buena ejecución de Serrano le dio el empate al conjunto de Villa Crespo que respiraba de otra manera.
Inmediatamente, luego de lograr el empate, Benítez jugó con Quiroga quien metió un gran centro a la cabeza de Maraschi, para lograr dar vuelta un partido que dejaba muchas dudas luego de la primera etapa.
Para el Club de Berisso fueron dos golpes duros y jamás pudo recuperarse. No tuvo chances claras para poder empatar el partido y comenzó a jugar un partido mucho mas duro. Así fue que Aguimcer vio la segunda amarilla tras una falta fuerte para dejar a su equipo con 10 hombres.
Atlanta pudo manejar de otra forma la pelota. Quedó tiempo únicamente para un disparo de Benítez desde afuera del área que se fue muy cerca del travesaño.
Si bien se vio un equipo duro y hasta en ciertos momentos lento, se logró dar vuelta un partido luego de mucho tiempo. En todo equipo nuevo los comienzos son difíciles y más allá de no jugar un gran fútbol se pudo clasificar a la siguiente fase de la Copa Argentina y empezar con el pie derecho una nueva temporada.